¿Estaríamos ante otro fraude electoral, una vieja costumbre mexicana?

Toma de pantalla del verdadero resultado en la página del IFE (según Anonymous) que mostraría la victoria del candidato del PRD, Andrés Manuel López Obrador. Lunes 2 de Julio de 2012, 10.35 horas México.

Pareciera ser que las viejas prácticas de fraude electoral en México siguen siendo una constante. El pueblo mexicano denuncia sin descanso una nueva manipulación electoral para defender una Democracia secuestrada por el régimen bipartidista... aunque la historia oficial lo siga negando.
La historia del fraude electoral de los últimos 30 años en México, resulta tan implacable como ricos son sus tacos al pastor. No existe archivo que se le resista. Bizarro, surrealista... vergonzoso. Fraude que consagra a un régimen bipartidista (PRIAN, acrónimo mexicano que suma a los dos partidos que se alternaron en el poder, el PRI y el PAN) mientras propios y extraños siguen desangrando y lapidando a la Democracia en el país azteca.

La historia de los últimos años en México no muestra evidencia suficiente que relacione el resultado electoral y los votos emitidos. Allí están sin excepción los años 1988, 1994, 2000 y 2006. Desde películas, documentales, libros, testimonios... todos hablan de los métodos y prácticas del fraude. Hasta existe un museo del fraude con pruebas incontestables que confirman la lamentable sentencia de que en México parece que nunca se cuentan todos los votos.

Ayer, la complicidad de los medios de comunicación convencionales y monopólicos con el fraude electoral en México, representaba una verdad insoslayable. Hoy, con la explosión de los medios tecnológicos en tiempo real (Foros en Internet, Facebook, Twiter, móviles de última generación...) pareciera que esta vieja labor de los medios ya no puede convencer, ya no puede solapar, ya no puede contener. Algo se sigue reproduciendo en el México profundo, pero ahora las pruebas las aporta el ciudadano que tácitamente se conjura para ser el más implacable e insobornable observador electoral.

Mientras los ciudadanos marchan espontáneamente hacia Los Pinos (casa presidencial en el D.F.), las plataformas como Twiter no dejan de subir imágenes de casillas, conteos y resultados en diferentes distritos de México. Testimonios que afirman haber recibido lapices para ir a votar que al mismo momento se pueden borrar con solo pasar el dedo y sin dejar rastros en el papel y la piel misma. Boletas con los candidatos presidenciales que nunca llegaban hasta recién pasado el mediodía en distritos históricamente seguidores del PRD (Andrés Manuel López Obrador). Malos conteos sobre las propias boletas... y un sin fin de denuncias una más incréible que la otra.

Sin embargo, como si se tratase de un México paralelo, los medios han anunciado que el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto, ganó las elecciones presidenciales de México, de acuerdo con una muestra de actas de votación elaborada por el Instituto Federal Electoral (IFE).

Según esta muestra de cerca de 7.500 actas, Peña Nieto obtuvo entre el 37,93 y el 38,55 por ciento de los votos, anunció el presidente del IFE, Leonardo Valdés, por cadena nacional. De acuerdo con esos datos, el aspirante de la izquierda mexicana, Andrés Manuel López Obrador, obtuvo entre el 30,9 y el 31,86 por ciento de los sufragios. En tercer lugar quedó la candidata del gobernante Partido Acción Nacional (PAN), Josefina Vázquez Mota, que logró entre el 25,10 y el 26,03 por ciento.

¡Estos datos fueron tomados de las actas de 7.597 mesas electorales de las cerca de 143.000 que fueron instaladas en todo el país!

Hoy por la noche se espera conocer los resultados provisionales casi totales, con todas las actas que se hayan recibido en el IFE. El llamado "conteo rápido" que dio a conocer el IFE "es un excelente instrumento" para conocer cuál será el resultado final de la elección, declara Valdés, quien dijo que sólo busca "informar a los ciudadanos y dar certidumbre a la elección", con un margen de error del 0,5 por ciento. También señaló que la participación en los comicios fue superior al 62 por ciento y dijo que votaron más de 49 millones de personas.

"La de hoy es la elección que más votos ha recibido en la historia de México", añadió.

Pero para el candidato del PRD, Andrés Manuel López Obrador, víctima de un supuesto fraude electoral en 2006, los datos no están claros y espera el conteo final ya que cree y sostiene que él tiene datos completamente diferentes (como muestra claramente la toma de pantalla presentada anteriormente).

"Hay un proceso legal establecido que consiste en llevar a cabo un escrutinio. Y el miércoles próximo se tienen que revisar todas las actas y conocer los resultados", declaró el líder de la izquierda mexicana.

Hasta en organizaciones activistas internacionales como AVAAZ ya se están generando denuncias y sospechas no solo sobre medios de comuniación como Televisa, sino también por la sensación popular de los mexicanos en cuanto a la posible manipulación electoral de la jornada de ayer Domingo.

Sea esta sospecha cierta o no, la historia del más que evidente fraude electoral en México no parece desmentir las sensaciones y denuncias que los mexicanos hoy están realizando. México está en estos momentos movilizado y no renuncia a defender su Democracia una vez más, aunque la historia oficial se lo niegue una y otra vez.