Inmaculada no existe. La mossa perseguida por decir 'Viva España'

rip 02.10.19 2:24

Inmaculada no existe

JOSÉ LUIS MIRÓ

Lunes, 30 septiembre 2019 - 11:27

La mossa perseguida por decir 'Viva España'

El pasado jueves fui una de las cien personas que escucharon el relato de la cabo de los Mossos d'Esquadra Inmaculada Alcolea sobre la situación de abandono que los catalanes no nacionalistas viven en su propia tierra. Acudí a la invitación de Convivencia Balear en el auditorio del Estudio General Luliano a título personal. Mi intención no era cubrir el acto como periodista, sino escuchar una charla, igual que voy a un concierto o a la presentación de un libro. Sin embargo, me siento obligado a escribir estas líneas porque, por increíble que parezca, el acto no tuvo apenas cobertura en los medios de Mallorca.

Tampoco se vio por allí a representante alguno de Ciudadanos, partido cuyos actuales dirigentes regionales -incapaces de hilvanar una frase conexa que no responda a la textualidad del argumentario oficial- están a años luz de ser dignos de sus homólogos catalanes.

Inmaculada contó en público y a cara descubierta -esto es asumiendo la plena responsabilidad de sus declaraciones- cosas terribles que merecen ser difundidas más allá de la sala en la que fueron pronunciadas. Dijo, por ejemplo, que en Gerona hay policías que identifican a ciudadanos no adeptos al régimen estelado para luego filtrar sus datos personales en las redes sociales. Del resto del trabajo se ocupan los matones de los Comités de Defensa de la República (CDR). Habló también de su caso personal: del mobbing al que está sometida por la División de Asuntos Internos (DIA) de esa suerte de Stasi en que se ha convertido la policía autonómica catalana. Contó que una joven compañera de 30 años, madre de un niño pequeño y cuyo único pecado conocido es estar casada con un guardia civil, ha causado baja por depresión debido al hostigamiento de sus compañeros de trabajo. Desveló que el mosso llamado Octavi, autor de la célebre frase «la república no existe, idiota», de quien ya casi nadie se acuerda, las está pasando canutas por haberse significado contra la independencia. Y advirtió: «Cuidado, el odio está muy extendido, estamos al borde de un grave conflicto civil».

Llevo 28 años en esta profesión y no necesito que nadie me diga que todo lo anterior es de interés público, especialmente en Baleares, donde un partido que defiende los postulados del separatismo catalán, apoya a presuntos terroristas con hilarantes teorías conspiranoicas y asume como propia la lucha de Otegi (o sea, la de ETA), está en el gobierno. No hay duda: el testimonio de Inmaculada merecía ser divulgado en los medios regionales. Pero fue groseramente ignorado. ¿Cómo es posible? La razón es simple: el nacionalismo progresista (un puro oxímoron) es el mainstream del periodismo local.

No es que lo que diga Inmaculada no importe, es que Inmaculada no existe.

https://www.elmundo.es/baleares/2019/09/30/5d91c85221efa069308b4678.html

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