El sucesor de "El Colores"

Nuevos informes de Inteligencia incluyen al identificado como  “El Tamayo”, de entre 28 y 38 años de edad, quien se desempeñaba como brazo armado del Cártel de Sinaloa en San José del Cabo y ahora pasó a ser líder de plaza; de igual manera, ubican a un joven conocido como “El R”, quien sería brazo armado de esa célula criminal.

Autoridades confirmaron que “El Colores” operaba con Sinaloa, particularmente con la célula conocida como “Fuerzas Especiales Dámaso”, identificadas desde el 31 de julio de 2014, para apoderarse de la plaza de Baja California Sur.

“El Colores” y/o “El Patreño” se identificó con las “Fuerzas Especiales Dámaso”, “Los Acosta” o “Los Javieres”, y con “Los Tegoripeños”.

El mapa delictivo, elaborado por las cabezas de mando de las instituciones de los tres órdenes de gobierno, han confirmado la presencia de tres grupos criminales actualmente, la disputa principal tiene lugar en La Paz y Los Cabos, donde se han identificado operaciones de “Los Tegoripeños” o “Los Javieres”.

También han llegado los grupos “Los Nueva Generación del Mayo”, aparentemente a la orden del Cártel de Sinaloa; y la célula delictiva identificada como “La Plaza” y/o “La Barredora”, dependiente del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Aunque no se ha logrado imputar delitos de homicidio a “El Tamayo”, cuerpos de seguridad han emprendido la búsqueda del nuevo cabecilla de las fuerzas sinaloenses en BCS.

“Han sido fuertemente debilitados los grupos delincuenciales, se les han asegurado droga y armas, pero también han sido detenidos hombres armados, los cuales han sido identificados como miembros de Sinaloa. Aunque la complexión no ha sido confirmada en las diversas pruebas periciales, sí se ha confirmado la presencia de ‘El R’ y detenidos que han mencionado al Tamayo”, se informó a ZETA.

El último incidente registrado, confirmó la presencia de jóvenes entre 17 y 28 años participando activamente como sicarios, así fueron grabados al interior del Hospital de San José del Cabo la madrugada del viernes 14 de septiembre, intentando rescatar a un sicario herido la tarde anterior, en un enfrentamiento entre policías ministeriales, estatales y de la Secretaría de Marina en la colonia Monterreal de San José, en Los Cabos.

“Dos personas se dieron a la fuga tras el enfrentamiento en Monterreal, fuentes confirman la presencia del brazo armado de Sinaloa, sin embargo, no podremos confirmarlo hasta que obtengamos la información, ya tenemos un gran avance con los dos detenidos, esa información aún está bajo resguardo porque van a caer otros más, en breve daremos a conocer”, refirió un agente de la Policía Ministerial del Estado.

Si bien, la figura de “El Tamayo” no ha sido reconocida, autoridades vinculan ciertas operaciones para infligir temor a sus rivales por parte de “El Colores”.

En un video publicado por grupos criminales el 15 de marzo de 2017, la célula sinaloense interroga a Israel Ramírez Bastidas, un joven con largo historial delictivo y adicto a estupefacientes; en ese momento había cuatro sicarios.

“En ese momento pudimos deducir, por la complexión de cada uno, a por lo menos ‘El Colores’ y al ‘Tamayo’, los cuales estaban presentes, interrogando a un ‘halcón’ o ‘soplón’ que estaba entregando a narcomenudistas de Sinaloa.

“En ese momento no estaban plenamente identificados como líderes, pues apenas había caído ‘El Lucifer’, lo que comprueba que inmediatamente habían asumido el control de la plaza”, refirió la fuente.

El adicto interrogado “dio luz” a las autoridades, de allí se desprendieron miembros del CJNG días después del interrogatorio del 26 de marzo de 2017.

“El Barbas”, entonces miembro en activo y preparador de sicarios para Jalisco, fue ultimado en la zona hotelera de San José del Cabo,  sobre e Bulevar Antonio Mijares, entre los hoteles Holiday Inn y Mayan Palace.

El blanco de “El Tamayo” también fue considerado en operaciones con “La Morena”, quien fuera privada de la vida el 6 de enero de 2017 en San José del Cabo.

Mientras que la tarde del 8 de julio de 2018, Andrés Márquez Ulloa “El Pájaro” fue capturado por agentes de Inteligencia de la Policía Federal en La Paz y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), cateando dos domicilios en las calles Ignacio Ramírez y Michoacán de la colonia Pueblo Nuevo; y en Ocampo, entre Ramírez y Altamirano, Colonia Centro. Llevaba consigo dos armas cortas, dos cargadores, 21 cartuchos útiles, 142 envoltorios de cocaína, 63 envoltorios de cristal y 13 envoltorios de marihuana.

“Según los objetivos trazados por la célula delincuencial, falta un miembro de ‘La Plaza’ del Cártel Jalisco, ‘El Pecheras’, el cual ha recibido atentados por parte de sinaloenses, pero por una u otra razón las casas de seguridad baleadas están vacías. Es uno de los blancos también para nosotros, Inteligencia trae al ‘Tamayo’ y al ‘Pecheras’, reiteró el efectivo de las Fuerzas Armadas.

Inteligencia militar ha colocado en el mapa delincuencial a las presuntas dos cabezas, tanto de Sinaloa, como del CJNG. Ambos son descritos como jóvenes ex gatilleros y ahora líderes de plaza. Hasta el momento sigue la identificación a través de retratos hablados y fotografías que se han asegurado tanto a sicarios como narcomenudistas.

El 14 de agosto, agentes de la Policía Ministerial recibieron mayores informes de “El Tamayo”, justo cuando la de nombre Daniela “N”, de 29 años, fue “levantada” por un grupo armado en San José del Cabo.

“Ese día se activó un fuerte operativo de seguridad para la búsqueda de la víctima, aunque se informó que fue localizada, agentes de investigación pudieron corroborar presuntamente vínculos con Tamayo”, refirió en su momento la PGJE.

A partir de entonces, fuerzas del orden han implementado operativos, “tenemos una carpeta elaborada, son muchos casos, pero tenemos investigación sustentada para aplicar la Ley”, agregó la fuente de la procuraduría estatal.

Miembros del Grupo de Coordinación de Seguridad Pública han reforzado cada una de las estrategias implementadas en la lucha contra la delincuencia organizada, el periodo de contención se ha extendido, aunque hay registro de operaciones por miembros de células delictivas, “operaciones a menor escala”, dirían las fuerzas de seguridad, pero siguen ocurriendo a plena luz del día.

“En ese sentido hay una contención, porque este esfuerzo tiene que ser permanente, independientemente de que estamos aplicando la Ley, se está combatiendo la impunidad, hemos ido dejando detenidos, personas vinculadas a grupos delictivos, sobre todo la delincuencia común, que es lo que más aqueja o agravia al ciudadano”, consideró Daniel de la Rosa Anaya, procurador general de Justicia en BCS.

El 20 de septiembre, Sinaloa de nuevo hizo presencia a su estilo. Por lo menos dos sicarios fueron vistos en la ejecución de Manuel Fong “El Burger” de 34 años, ejecutado en el callejón de Puerto Cortés  en la colonia Pueblo Nuevo, a sólo unos metros de la Clínica 1 del IMSS de La Paz.

“Cómo es posible que pasen estos hechos, había demasiada luz del día, una zona de alto tránsito, si fuera un simple homicidio con arma de fuego, ocurre con un rifle 22 o una pistola, pero ocurre con arma larga, varios impactos y dirigidos, con tiradores de profesión, lo que deja abierta la posibilidad de ajustes entre células criminales”, expresó un elemento de la Policía Municipal de La Paz.

Personal de Investigación e Inteligencia de la Policía Federal, confió información sobre “El Burger”, identificado como distribuidor de estupefacientes en la zona dorada de La Paz, principalmente en bares y antros.

“No tenía necesidad para vender droga, era moda o de alguna manera logró incrustarse en la estructura criminal, sus tatuajes y sus cercanos nos hace llegar a identificarlo como miembro o vínculos con ‘La Plaza’ o distribuidor de Jalisco Nueva Generación”, revelaron efectivos adheridos al Grupo de Coordinación de Seguridad Pública en Baja California Sur.

Septiembre cerró con 19 personas privadas de la vida de manera violenta, lo que pone en alerta a las autoridades, pues la mayoría de los sucesos surgieron entre La Paz y Los Cabos, ambos en disputa entre células criminales que pretenden expandir sus operaciones de venta y distribución de estupefacientes.

En el peor de los casos, los grupos delincuenciales han encontrado la manera de operar sin ser detectados, o por lo menos hallaron huecos en la estrategia, pues aunque no han sido muchos casos, la mafia ha demostrado que cualquier hora y lugar son ideales para llevar a cabo sus actividades criminales.

“Estamos trabajando para identificar y erradicar a cada uno de los miembros en activo de cada grupo, estamos en el entendido que van a seguir ajustando cuentas. Estamos para judicializar cada uno de los delitos, ellos decidieron delinquir, pero nuestra labor es atrapar a toda persona que esté en impunidad o sobre la Ley. En resumidas cuentas, los avances que Inteligencia nos ha mostrado, dan pie a garantizar que no vamos a echar en saco roto cada una de las carpetas de investigación e indicios para capturar criminales”, se advirtió desde la PGJE.

Por último, elementos de Inteligencia revelaron que existen otras investigaciones abiertas:

“No sólo se trata de investigar a miembros de la delincuencia, esto no se va a acabar si seguimos con la misma corrupción, por ello traemos en la mira a agentes de seguridad vinculados, si no, cómo podemos saber que ‘El Colores’ podía entrar y salir al Estado al igual que ‘El Tamayo’. Ambos tienen participación de elementos en activo, los cuales han permitido que operen tranquilamente, estamos cerrando filas para que caiga quien tenga que caer”.